Todas las organizaciones estamos inmersas en mayor o menor medida en procesos de evolución digital. Esa evolución está íntimamente relacionada con avances en la estrategia hacia modelos como servicio, de manera creciente de software como servicio (SaaS). Las principales ventajas que ofrecen este tipo de estrategias son una mayor flexibilidad, agilidad y eficiencia.

Estas capacidades favorecen que el mercado de SaaS esté en claro crecimiento, de hecho, IDC prevé que el mercado europeo crecerá de 54 mil millones de euros en 2020 a 140 mil millones en 2025, lo que supone una tasa compuesta anual del 21%.

Sin embargo, es fundamental tener siempre en cuenta cual es la mejor cloud para cada organización y cada carga de trabajo, y se hace necesario comprender las distintas posibilidades dentro de estos procesos.